Mostrando entradas con la etiqueta HISTORIA. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta HISTORIA. Mostrar todas las entradas

martes, 14 de octubre de 2008

Los esclavos de la Argentina

El Archivo General de la Nación digitalizó, por un convenio con la Unesco, parte de su documentación sobre esclavos en el Plata.

Liliana Moreno
El Archivo General de la Nación finalizó esta semana la digitalización de 500 documentos escritos sobre la esclavitud en el Río de la Plata entre los siglos XVI y XVIII. Equivalen a más de nueve mil imágenes de actas frías y en lenguaje técnico sobre desembarcos, remates, casamientos y liberaciones de negros que revelan, sin embargo, "la mayor tragedia de la historia de la humanidad, tanto en términos de duración como de escala", como la definió el historiador francés Jean-Michel Deveau. Este trabajo es la primera experiencia de informatización documental que realiza el Archivo y nace de un acuerdo con la UNESCO en el marco de su proyecto "La ruta del esclavo": una reconstrucción del sistema de trata de esclavos, al que define como "el primer sistema de globalización de la historia", obviamente, en clave de horror.

La UNESCO lanzó su proyecto en 1994 con los objetivos de indagar las causas y las modalidades del tráfico de esclavos y de revelar las interacciones —culturales, por ejemplo— que generó en América, las Antillas y el Océano Indico el desembarco de decenas de millones de africanos.

El valor de la documentación que conserva el Archivo General de la Nación (AGN) lo hizo partícipe de este proyecto: financiado por la UNESCO, aquí debían seleccionarse y digitalizarse 500 documentos sobre la esclavitud en el Río del Plata. Los trabajos en Buenos Aires empezaron en febrero y terminaron esta semana. Internet y CD Rom son las dos fabulosas herramientas que permiten su difusión planetaria tanto como la conservación de los documentos originales.

En las nueve mil treinta y seis imágenes escaneadas, los trazos perfectos y voluptuosos de la pluma sobre el papel sepia dan cuenta de causas contra esclavos por desacato, de juicios por contrabando de negros, de citaciones para alistarse a servir al rey o, en el mejor de los casos, de pedidos de autorización para realizar bailes "a su usanza".

Son actuaciones de gobernadores, virreyes, intendentes y consulados en los que, por ejemplo, un tal José Orellano solicita en 1719 "deducir del precio pagado por los esclavos que remato en el real asiento de Inglaterra, el de algunos que resultaron inútiles por estar enfermos"; el pedido a la Real Audiencia "para castigar con azotes a negros, mulatos e indios"; la constancia "del casamiento de uno, (propiedad) de Diego Torres, llamado José María con Juana Aguirre"; o la prohibición a negras y mulatas "del uso de determinadas prendas por los escándalos que resulta de ellas". Un universo que aunque aparece doméstico y cotidiano "aporta valiosos elementos para el estudio del comercio, la agricultura, la vida en las fronteras, el transporte y las guerras", dice Miguel Unamuno, director del AGN.

La selección de documentos se hizo desde fines del 1500 hasta 1820, cuando desaparecen las últimas instituciones propias de la burocracia indiana. Son escasos los que corresponden a los siglos XVI y XVII y, en cambio, son muy ricos los del siglo XVIII, "fundamentalmente en las últimas décadas —explica Unamuno— cuando el advenimiento de los Borbones trajo consigo una profunda reestructuración a nivel territorial y administrativo". La creación en 1776 del Virreynato del Río de la Plata empuja el crecimiento de Buenos Aires y de su campaña: la gran aldea deja de ser un centro de distribución de esclavos hacia el Alto Perú o Chile para convertirse en un mercado esclavista porque necesita a los negros como mano de obra.

Los 500 documentos digitalizados a partir del convenio con la UNESCO equivalen aproximadamente al 20 por ciento de la documentación general que conserva el AGN sobre el movimiento esclavista en el Río de la Plata. En la selección pesó tanto el criterio de dar una idea global del fenómeno como la preservación del material original, por eso entre los elegidos tuvieron preferencia los documentos más consultados por los investigadores.

Para gozar de la predilección que le confiere la UNESCO a los fondos documentales distribuidos en el mundo no alcanza conque sean importantes para un país sino que tienen que servir, por lo menos, como un espacio documental para varias naciones o continentes. Un requisito que, para Unamuno, cumple ampliamente el material del AGN: "Porque es muy valioso no sólo en cuanto al pasado de la Argentina sino de los países del Cono Sur de la América meridional. De modo que el nuestro puede ser considerado para el período colonial y las primeras décadas del período independiente como el principal archivo del Mercosur."

viernes, 3 de octubre de 2008

Religiones Afrobrasileñas

Son consideradas Religiones Afrobrasilenãs todas las religiones que se originaron y desarrollaron por los esclavos traídos a Brasil y se relacionan con la Religión tradicional de los pueblos yoruba y otras comunidades tradicionales africanas. Son similares a las Religiones Afroamericanas como la Santería de Cuba y el Vodou en Haiti.

Principios Básicos

Dios
Yorubá | Olorun | Orixás
Fon | Mawu | Vodun
Bantú | Nzambi | Nkisi

Religiones similares:

Religiones Tradicionales Africanas, Religiones Afroamericanas: Santería lucumí, Palo Mayombe, Nación Arará, Regla de Ocha, Obeah.

En Brasil, de acuerdo a la región, se llaman:
* Babaçuê - Pará
* Batuque - Rio Grande do Sul
* Cabula - Espírito Santo, Minas Gerais, Rio de Janeiro e Santa Catarina.
* Candomblé - En todos los estados de Brasil
* Culto Egúngún - Bahia, Rio de Janeiro, São Paulo
* Culto de Ifá - Bahia, Rio de Janeiro, São Paulo
* Quimbanda - Rio de Janeiro, São Paulo, Río Grande do Sul
* Macumba - Rio de Janeiro
* Omoloko - Rio de Janeiro, Minas Gerais, São Paulo
* Tambor-de-Mina - Maranhão
* Umbanda - En todos los estados de Brasil
* Xangô do Nordeste - Pernambuco
* Xambá - Alagoas, Pernambuco


En las religiones afrobrasilenãs se utilizan varios términos para designar el proceso de Iniciación. Cada modalidad tiene sus propios términos: iniciación, feitura, feitura de santo, raspar santo -en los terreiros de candomblé, Candomblé de Caboclo, Cabula, Macumba, Omoloko, Tambor de Mina, Xangô do Nordeste, Xambá. En tales casos, el período de iniciación es al menos de siete años, incluye el rito de comienzo de la iniciación, indicando los distintos procedimientos en un plazo de reclusión que por lo general de 21 días (que puede variar dependiendo de la modalidad ritual), el aprendizaje de las oraciones, canciones, lengua sagrada, el uso de las hojas (hierbas sagradas), catulagem, raspado, la pintura, la imposición del adoxú y presentación pública. Este proceso es individual y forma parte de la obligación de cada persona que comienza en la religión de los orixás; en Batuque se utiliza el término "aprontar la cabeza" y "feitura". En el Culto de Ifá y el Culto Egúngún se utiliza el término iniciación, pero las obligaciones son diferentes a las de las otras religiones.En el Candomblé Jeje o culto a los vodun la iniciación es larga y compleja, pudiendo agregar largas caminatas a los Santuarios y mercados, así como períodos de aislamiento en el convento o terreiro (hunkpame en Fon), que pueden llegar a un año, cuando los neófitos son sometidos a una dura rutina de danzas, oraciones, aprendizajes del idioma sagrado y formulación de votos de obediencia y confianza.


El ritual ìjèsà























Proveniente en su origen de la región de Ilésa –hoy Estado de Òsun- en Nigeria, es uno de los “lados” o “naciones” nagô del batuque gaúcho. En efecto, cuando decimos “nagô” no decimos otra cosa que “yòrùbá”, porque “nagô” era la manera de los franceses de designar a todos aquellos individuos que hablasen “anàgonu”, el lenguaje ceremonial de los yarriba o yòrùbá. Decir “nagô” pues, es decir genéricamente “yòrùbá”, y muchas de estas etnias se han plasmado de algún modo en los rituales del batuque. Entonces, cuando nuestra intención es dar fehacientemente un origen familiar, decimos “nagô Oyó”, “nagô Ire”, “nagô Ijesha”, etc. Y la expresión “jèje” también resulta imprecisa: hay “jèje popo”, “jèje mina” y “jèje marrin –o mahi-“; de modo que convendría para ser exactos en el hablar renunciar a los genéricos “nagô” y “jèje” sustituyéndolos por el lado del que proviene nuestra bacía. Por otro lado, ya los especialistas brasileños en Etnoantropología han descartado el antiguo binomio “jèje-nagô” para definir las religiones afrobrasileñas dedicadas al culto de los orisha ya que obviamente si son jèje, van a rendir culto a los vodun de su pueblo, incluyendo en este elenco a algunos orisha de diversas procedencias –siempre yòrùbá, claro, pues son “òrìsà” y sólo los yòrùbá cultúan orisha- pero asentados, tratados y servidos como vodun “extranjeros”; y si son nagô hacen exactamente lo mismo, asentando, tratando y sirviendo vodun como si se tratase de sus propios orisha. De allí que antiguos vodun que aún hoy reciben culto como tales entre sus paisanos originales, sean objeto de culto entre los yòrùbá como si se tratase de divinidades propias -Sàkpata, Lépon, Sogbo, Averekete, o Nàná son ejemplo de esto- mientras que en la famosa y tradicional Casa das Minas en Maranhão se recibe respetuosamente a toda una serie de divinidades “nagô” que no se comunican oralmente con los adeptos “para no traicionar los secretos y fundamentos de su pueblo”, como consignan los profesores Sérgio Ferretti y su esposa Mundicarmo da Rocha Ferretti. Es casi seguro que cuando se habla de “sincretismos” olvidamos los internos y los posiblemente anteriores a la trata esclavista dentro de la propia África, producidos en el constante contacto de los pueblos cercanos ya sea por razones culturales, económicas o de beligerancia.

Pero no vamos a ir mucho más allá en este análisis, ya que fuimos invitados a describir únicamente las particularidades de la nación ritual o lado que seguimos, la ijeshá. Esta nación reconoce a la divinidad del agua dulce, Òsun, como su patrona, es decir, su “antepasada mítica”, aunque un batuquero de gran prestigio como el finado Pedro de Yemanja sostenía que también Shangó era “padroeiro do Jexá”. Esta modalidad ritual puede reconocerse por el orden secuencial de los orisha a ser reverenciados:

Bàrá – Ògún – Oyá – ngó – Ode y Otin – Oba – Òsònyin – npònnòn – Ìbèjì - Òsun – Yèmoja – Òsànlá

Reconoce también otras divinidades independientes como Nàná, generalmente asociada a los ashé de reza u orin de Yèmoja y Lògún –cazador/pescador hijo de Òsun con Ibùalamò – así como a Òrunmìlá, divinidad del Oráculo que ha sido integrado a los “pasajes” de Òsànlá aunque sus funciones y características sean absolutamente excluyentes ya que no se trata de una divinidad de posesión.

Otra característica de este lado son las “pancadas” o padrones rítmicos que se asocian a las melodías y a los textos que componen los ashé de reza. Esta impronta sonora añadida a la danza que gestualiza los mitos de los orisha es quien provoca la comunicación de los mismos con sus iniciados a través del trance u “ocupación”, ya que se entiende que el orisha personal no es un elemento exterior adquirido sino innato, y por tanto no “se incorpora” sino se asume “ocupando” la personalidad reconstruida del orisha la mayor faja posible de conciencia.

Estas “pancadas” guardan correspondencia con los orisha al punto que algunas de ellas son exclusivas, permitiendo la relación divinidad/humano aun sin haber participación de melodía o texto cantado, únicamente “padrón rítmico”. Ejemplo claro son el “alòjà” de ngó, el “agèré” de Oyá y el “ìgbìn” de Òsànlá. Hay sin embargo otras que son comunes a dos o más orisha –“toboriné”, “ayàgbá”, “odã” y el “olókorí” (que podría decirse es el ritmo de esta nación por excelencia, ya que pertenece a Òsun y a Obokun, la versión étnica de Òsànlá)- una que es común a todos – el “jèje”- y otra para casi todos, pues excluye a los Ìbèjí, a Yèmoja y a Oba: el “are”.

El repertorio de esta modalidad ritual configura un modelo de música sacra diferenciado de los otros “lados” –las demás naciones que aportaron sus modelos culturales al batuque- aunque esto no implica que no puedan ocurrir diferencias o similitudes entre casas de otro lado cualquiera, lo que demuestra la normal apropiación de ashés de reza que se produce en el ámbito religioso. Quizá esto se deba a la carencia general de tamboreros propios que tienen las casas de nación, debiendo contratar los servicios de profesionales que pertenecen a otras tradiciones culturales, así como también a las “preferencias” o “gustos” de un líder que escuchó en una casa un determinado ashé que le pareció bonito y comenzó a aplicarlo en la propia sin tener en cuenta que podría pertenecer a otro acervo.

Las diferencias en cuanto a la “feitura” de los orisha dentro del pèji suelen ser mínimas y referirse mucho más a los “enfeites” de las vasijas sagradas que a particularidades propiamente dichas. Sin embargo, podemos señalar que algunos detalles en el color de los animales votivos, en el criterio seguido para armar los collares sagrados y en el cuidado de las quartinhas pueden resultar significativos a la hora de describir los lugares comunes de este “lado” del batuque. A modo de ejemplo, el lado ijesha difícilmente ofrece animales enteramente blancos para ìyá Oba –y en el caso de aves usará preferentemente gallinas “polacas”- el criterio de los materiales empleados para enhebrar las guías se ajustará al elemento primordial del orisha –fuego y tierra/loza, aire/porcelana, agua/vidrio transparente de color o no- y las moringas serán vaciadas semanalmente de su agua sin posibilidad de “rellenarlas”.

Publicado originalmente por la Revista "Búzios" número 8, editada por pai Alejandro Morales de Shangó.


miércoles, 18 de junio de 2008

POQUITO ANTES DE ZELIO

Antes de la llegada de los colonizadores existían en Brasil cultos indígenas divididos en dos grupos: el de las tribus amazónicas y el de las otras religiones indígenas.

Con la llegada de los cultos europeos, como el catolicismo popular y el espiritismo kardecista popular se produce la mezcla de estos con los cultos indígenas y aparece una forma de espiritismo kardecista indígena llamado "Pajelanza".

Agreguemos a esto el ingreso del movimiento denominado Ocultismo, también procedente de Europa y conocido como la Cábala hebraica. Ahora bien, con la llegada de representantes de las naciones africanas, comienzan los cultos afro-brasileños (organizados).

En la primera etapa de los mismos diremos que encontramos los siguientes grupos: primero, la gran nación yoruba, integrada por los Nagô, Ijexá, Keto, Oyó, Jeje, Jeje-Nago, Mina-Jeje, Muzurumim. Todos estos de origen sudanés, provenientes de la llamada costa de esclavos e integrada por los países de la República Popular de Benin (ex Dahomey) y la República Federal de Nigeria.

El segundo gran grupo era de origen bantú, perteneciente a Congo, Angola, Mozambique, y las mezclas resultantes de la unión de ellos.

Los yorubas se impusieron sobre todos los demás implantando su lengua, sus dioses (orixás) y muchas de sus ceremonias y rituales. Los mahometanos escapan a esta transculturación, manteniéndose alejados y desapareciendo más tarde.

Estas religiones procedentes de las diferentes ciudades de Nigeria, todas de lengua yoruba, llevan el nombre de las ciudades de este país pues representan las naciones o las costumbres tradicionales de cada ciudad. Por esta razón, aparecen los oyós, que son oriundos de la ciudad del mismo nombre, donde se cultúa al orixá Sango (Xango).

Los cabinda hacen referencia al nombre de una isla frente a Angola; son, por ende de tradición bantú. Adoptan por transculturación las tradiciones de los yorubas hasta la propia lengua.

La nación Nagô tiende a desaparecer como tal y en R.G. do Soul se integra a los otros grupos existentes. Los jejes de Bahía y de R.G.S. mantienen sus características originales pertenecientes a las más puras raíces dahomeanas, cambiando algunas formas adaptadas a los otros grupos, pero todos ellos con un ritual en común, el procedente de la lengua madre yoruba.

Los ijexá se dividen en dos grupos: uno queda en Bahía y el otro va al sur. Cuando decimos que se dividen nos referimos a que así se encontraron geográficamente distribuidos en las regiones de Brasil. Esta división tuvo origen en la venta y remate de seres humanos africanos como esclavos.

A esto sigue una segunda etapa dentro de los grupos espirituales y doctrinarios africanos. Ella corresponde a la mezcla entre los nagô y la pajelanza originando lo que se llamó "Candomblé de caboclo". La utilización de los tambores y las canciones llamando a los espíritus de los indios hizo que esta nueva forma de espiritismo se mezclara con los Candomblés existentes y se crearan nuevos grupos que pretendían legalizar los cultos africanos con los de Umbanda. Se creó así una lucha interna en la que los umbandistas se definían como "sin tambores, sin matanza y de blanco".

Ahora bien, en esta segunda etapa se mezclan los grupos angola-congo y pajelanza, dando nacimiento a lo que se conoció como Toré y Catimbó al norte y noreste respectivamente. Ellos tampoco escapan a la influencia del espiritismo kardecista ni tampoco al sincretismo católico, a fin de lograr la aceptación y la legalidad de las autoridades.

Es posible aún distinguir una tercera etapa en la que los nagô, muzurumin, angola-congo y el candomblé de caboclo se entrelazan y forman lo que el vulgo denominó MACUMBA y que luego derivó en el concepto popular de hechicería. Esta primaria macumba fue llamada así porque inspiró cierta desconfianza en el pueblo y en los espiritistas kardecistas, pues se creía que estos grupos tenían algún pacto demoníaco y se planteaban la posibilidad de realizar hechizos tan potentes que podían hacer desaparecer aun ser humano. Algo similar ocurrió en Cuba cuando la palabra vodou, vodum, que significaba "dios" o "dioses", cayó en manos de los escritores y cineastas de terror, en el culto a los muertos y que nada tenían que ver con la realidad de la misma.

La macumba primitiva se une al sincretismo católico para su aceptación, y toma los conceptos fundamentales del espiritismo kardecista y del ocultismo proveniente de la cábala hebrea, dando como resultado, el nacimiento de un nuevo culto, la Umbanda (popular y esotérica) que se transforma en bandera de los humildes, negros, sambos y mulatos. Esta es la Umabanda de Zelio de Moraes, su fundador.

Las persecuciones de que fueron objeto los integrantes de los distintos cultos, tanto africanos como amerindios, por parte de las autoridades, hizo que se afirmara, cada vez más, la fe en las fuerzas de la naturaleza y en el mundo espiritual que las rodeaba.

Los diferentes candomblés tomaron a exu como el espíritu guardián y vengador de estas situaciones, dando nacimiento a la KIMBANDA, término éste que pertenece a la lengua bantú de los angola-congo y que significa "sacerdote curador".

Los exu fueron sincretizados con el demonio cristiano, a efectos de intimidar a las clases dominantes, que a raíz de su propia formación sentían temor al demonio por la culpa de los primeros pecadores.

Los nombres de los exu fueron traducidos al portugués y se les dio un halo de malignidad que hizo que la Kimbanda prosperara rápidamente, teniendo su propio sistema de culto, ritual y ceremonias.

La Umbanda no queda, sin embargo, en esta etapa; se acerca a los candomblés diversos y fusionan rituales y ceremonias creando la Umbanda de Omolocô. En el sur sufre la modificación impuesta por el BATUQUE, término que indicaba "reunión de negro".

En realidad, a quienes unificaba era a los africanos provenientes de la Costa de esclavos y que pertenecían a los yorubas, pues los jejes, oyós, ijejás, cabindas y nagôs habían prácticamente desaparecidos en Rio Grande do Sul.

La Umbanda modifica los colores originales de los siete orixás que comandan los diferentes grupos de espíritus de indios y negros esclavos, son aceptados los tambores del batuque y llegó a llamarse UMBANDA-NAGO y UMBANDA-JEJE.

Aún nos quedan por definir dos grupos que se separan de la Umbanda-Afro y que son la Umbanda de caritas, con sesiones alrededor de una mesa blanca y todos sus miembros vestidos de blanco.

La Umbanda propiamente dicha realiza sus sesiones con la vestimenta blanca, pero sus canciones o puntos (pontos) son cantados con acompañamientos de palmas, estando sus integrantes descalzos y sin ninguna cadena o pulsera de metal.

El tambor dentro de las ceremonias de Umbanda ingresa con la participación de los Candomblés o los Batuques, en el sur.

A la persecución se le agregó un axé o maracas, como así también pandeiros y hasta una guitarra, símbolo de Río Grande y del gaucho, siendo estos últimos, los menos. La vibración de los instrumentos de percusión en las ceremonias umbandistas hace que el médium se sienta más compenetrado y transforme, de esta manera, la incorporación en una danza de caboclos y prêtos. La comunicación con los prêtos y los caboclos hace que pidan a sus cabalos o aparelhos que se coloquen penachos de plumas, lanzas, arcos y flechas, similares a los verdaderos. En cambio, para los prêtos se colocan turbantes, pañuelos de colores alrededor del cuello, sombreros de paja, delantales, polleras amplias blancas o de colores, pipas, canastas para colocar la comida o las hierbas curativas.

En definitiva, las sesiones de Umbanda toman hoy un colorido y un ritmo muy particular, indicando las danzas correspondientes a cada uno de los grupos que se invocan mediante las canciones o puntos cantados.

El encuentro de negros en indios de diferentes tribus, en los templos de Umbanda, hace sentir una recíproca comprensión entre ambos, unidos en el sentimiento común de la ayuda al prójimo como su propio aparelho, médium, indicando que tienen una misión que cumplir, indicada por el superior astral.

Si observamos esto folclóricamente veremos que estas dos razas son semejantes, por lo tanto, no fue difícil para ninguna de las dos fusionar la magia de sus rituales y de sus danzas, acompañadas por similares instrumentos musicales.

La magia de los africanos y la de los indígenas se aceptó mutuamente y hoy lo observamos en las formas casi iguales que tienen los prêtos y los caboclos al presentarse frente al creyente y darle la caridad espiritual.

A los colonizadores portugueses y españoles, que eran muy supersticiosos, les costó aceptar el estado de posesión que fue confundido con el satanismo. Algunos psicólogos denominan hoy ese estado historia colectiva. Aunque el encantamiento de la magia fascinaba a los señores colonizadores de aquella época, debemos recordar que la Umbanda no debe ser vista como un mero folclore sino como una religión de presencia y participación.


YORUBA

La lengua de los Orixás

Seminario de Christopher Fayemirokum en A.T.E.E.U.M.D. - 1994

La lengua Yòrùbá es la hablada en las 16 naciones africanas que integran la gran nación Yorubá unificada por Odudua. Cada una de estas naciones al ser transportadas a América se mezclan con otros contingentes de africanos provenientes de otros lugares de Africa como Senegal, Camerún, Angola, Congo, Mozambique, ...

Al ser la mayoría Yòrùbás ejercen la influencia del idioma y de los dioses sobre las otras minorias. El cautiverio en tierras extrañas los unifica. Se unifican los idiomas y también se unifican las culturas. Los llamados Yòrùbás propiamente puros son los que integran el noroeste de Nigeria y la actual República Popular de Benin, ex Dahomey.

Fue muy fácil para los esclavistas blancos llevarse yòrùbás por que las guerras tribales existentes hacían que los conquistadores de un pueblo a otro esclavizaran al pueblo conquistado. Por ende, vendian los esclavos para no tener revueltas internas y asegurarse de esa manera el reinado de los pueblos conquistados. Los otros grupos humanos pertenecientes a distintos estados del actual continente negro tienen su propio dialecto o lengua vernácula, caso de los:

Congos y Angolas cuyas lenguas en diferentes lugares van desde el Kibundo, Kisanga y Bantú. Los Bantúes fueron mayoría en una época y esa mayoría fue distribuida separadamente en diferentes haciendas del noreste brasileño, llegando inclusive hasta el Río de la Plata. Esta divisón los hizo mezclarse con los Yòrùbás, que eran más cultos, más fuertes y con una tradición religiosa avasallante. Hoy podemos decir que existen los Yorubás puros y los Yòrùbás producto de la transculturación. Los puros son Adele, Ashanti, Gen, Hula, Hueda, Goun, Aizo, Adja, Fon, Mahi, (A)Nago, Egbado, Egba, Yoruba, Ijesa y Fula. Según del lugar de donde provenieren se les denominaba como nación a la ciudad. Un caso típico de Yòrùbas puros son los representantes de la llamada nación de OYOS (Oyos, capital del estado del mismo nombre) que pertenece a los Yòrùbás puros, pues desde allí nacen los conquistadores que unifican el imperio. Y los grupos impuros son los que provienen de Angola, Congo y Mozambique y otros actuales países de Africa que por ser minorias se mezclan con el yorubá y como decíamos al principio adoptan sus dioses y su lengua. Un caso común conocido es el norte de Angola, la región Cabinda que se integra en el cautiverio a la cultura yòrùbá. En Angola, isla de Cabinda y su ciudades más importantes. Esta mezcla se asentó principalmente en la zona de Rio Grande do Sul contando hoy en día con un mayoritario grupo de adeptos a los dioses que integran esta llamada nación de origen angoleño, pero con lengua yòrùbá. Los Geges son también un grupo yorubá. Habíamos comenzado en numeros anteriores a explicar parte del lenguaje Yòrùba y a continuación vamos a seguir.

ÌDÚPÉ - AGRADECIMIENTO

E sé púpò

Muchas gracias a usted

O sé púpò

Muchas gracias a ti

Púpò - mucho/mucha

kò t’ópé (kò tó opé)

de nada/ no hay de qué

NUMEROS ORDINALES

Para los números ordinales se coloca «ik» o «ek» delante del número.

èkíní - primero

èkejì - segundo

èketa - tercero

èkerìn - cuarto

èkarùn - quinto

èkefà - sexto

èkejè - séptimo

èkejò - octavo

èkesàn - noveno

èkewà - décimo

Para los números 20, 30, 40, 50, 60, 70, 80, 90 y 100 también usamos «ek». Para todos los demás, reemplazamos las dos primeras letras por «ik».

11º - ìkokànlá

25º - ìkedógbón

19º - ìkokàndínlógórún

SALUDOS Y FRASES COMUNES

Bawo ni e wà? ¿Cómo está usted?

Alafia ni mo wà? Estoy bien

Estoy en Paz

Bawo ni o wà? ¿Cómo estas tu?

Jòwó Por favor

Ìrànlówó Ayuda

Ràn ní owó Dar una mano a alguien

ÀWON OJÒ ÒSÈ - LOS DIAS DE LA SEMANA

ojó àikú domingo día del descanso

día de la resurrección

ojó ajé lunes día del trabajo

día del comercio

ojó ìségun martes día del triunfo

ojó rú miercoles día temperamental

día de inquietud

ojó bò jueves día en que se vuelve a la normalidad

ojó etì viernes día en que se deja todo para descansar

ojó àbáméta sábado día de reunión, día del encuentro de fiesta

ÀWON ÈNÌYÀ - LA GENTE

Bàbá - Padre

Ìyá - Madre

Omo - hijo

Okùnrin - varón

Obìnrin - mujer

omokùnrin - hijo

omo bìnrin - hija

ègbón - mayor

àbúrò - menor

oko - esposo

ìyàwó - esposa

òré - amigo

òtá - enemigo

olópa - policia

ajagun -soldado

ìjoba - gobierno

awakò - chofer

òsìsé - trabajador

arúgbó - anciano

omodé - jóven

ègbón okùnrin - hijo mayor

ègbón obìnrin - hija mayor

aburo okunrin - hijo menor

aburo obìnrin - hija menor

bàbá bàbá mi - mi abuelo paterno

ìyá bàbá mi - mi abuela paterna

bàbá ìyá mi - mi abuelo materno

ìyá ìyá mi - mi abuela materna

Religiones anteriores a

Umbanda en Brasil

A raíz de la esclavitud, una serie de culturas africanas fueron llegando a América, y concretamente vamos a referirnos a las que hicieron su arribo a las tierras brasileñas. En un primer grupo tenemos la cultura Bantú, que estaba integrada por naciones de Angola, Congo y Mozambique, Cabinda y las naciones Benguela.. Otro grupo de culturas que podríamos enumerar sería la Sudanesa; esta estaba integrada por los Yorubá (nación Nagó de Nigeria), la nación dahometana (jeje del actual Benin), la nación fanti-axanti (minas, de la costa de oro, actual Ghana). Estas quedaron en Salvador de Bahía y otras en el Sur de Rio Grande, actual Porto Alegre y Uruguay.

Mujer africana del Congo.

Integrante de la cultura sudanesa islamizada.

Podríamos enumerar otra cultura.: la sudanesa islamizada, integrada por los hauçá, provenientes del norte de nigeria, los peul (fula) cuyo dominio era todo el norte del Africa negra, desde el atlántico al lago Chad, la nación mandinga, procedente de sierra leona y la nación tapa (nupé) proveniente del norte de Nigeria. Todas estas naciones también se establecieron principalmente en la zona de Salvador de Bahía.

Estas naciones o culturas, al llegar al nuevo continente sufrieron una serie de reestructuraciones al tenerse que adaptar al medio que les rodeaba. Una de las más importantes fue la influencia tan grande del catolicismo que imperaba en esa época. Esa reestructuración condujo a lo que se ha venido llamando «sincretismo», que no fue más que un medio de esconder a sus dioses (Orixás) tras determinados santos católicos que tenían ciertas afinidades en cuanto a características se refiere.

Perteneciente al grupo Bantú.

Mujer Peul.

Mapa de Mozambique, cuna de algunas naciones que llegaron al Brasil

Por su lado, los cultos indígenas existentes antes del descubrimiento de Brasil, tales como las religiones indígenas diversas y las religiones de las tribus amazónicas se unieron con los cultos europeos, como el catolicismo y el espiritismo cardecista dando lugar a la Pajelança, a la cual se sumó más tarde el ocultismo.

El candomblé, por su lado se dividió según su orígen, dando lugar al de orígen sudanés integrado por los Nagó (Yorubás con sus subdivisiones ijexá, keto, oyó, ...), Jeje (dahomey), Jeje - nagó, Mina - Jeje, Muçurumim (musulman). También surgió el de orígen Bantú integrado por las naciones de Angola, Congo y Angola-Congo.

Mujer de la nación Congo.

Mapa de la cultura Bantú.

La unión de la pajelança y los cultos nagó (Yorubás), dan nacimiento a lo que se conoce con el nombre de Candomblé de Caboclo, mientras que la unión de las naciones angola-congo con la pajelança dan lugar al catimbó y al toré,a los que se les sumarán influencias kardecistas y católicas.

A continuación los nagó, muçurumim, angola-congo, cabinda y el candomblé de caboclo pasan a ser denominados como Macumba o Hechicería por el pueblo.

La evolución continúa con la macumba primitiva uniéndose al catolicismo, al espiritismo kardecista y al ocultismo originando la umbanda en sus dos vertientes, popular y esotérica. Mientras que la macumba entra en una fase de transformación dando lugar a la Kimbanda.

Momento de trance durante una sesión espiritual.

Fotografía de Haití de iniciada en el culto Vudú.

Ropa tradicional de los integrantes del Candomblé.

Todas estas evoluciones de los cultos se fueron dando de forma aislada en determinadas zonas del Brasil. El siguiente paso se dio por igual en todo el país y esta evolución es la Umbanda Trazada que tendía para el lado del Candomblé, se mezcla con candomblés de diversos tipos dando lugar a la Umbanda de Angola (omolocó) y a la Umbanda seguida del nombre de las naciones por las que fue influenciada (Umbanda nagó, jeje, ...). Otra evolución de la Umbanda fue para la Umbanda de Blanco o Umbanda de Caritas, que se realizaba con mesa.

Todas estas mezclas fueron dando multitud de cultos que aunque conservan un tronco común, tienen diferencias significativas entre ellos.

Todos estos cultos se basan en la posesión de los integrantes por los Orixás o por las entidades vinculadas a la Umbanda y a la Kimbanda. Dentro de la Umbanda se da lugar a los Orixás que actúan de una manera activa gobernando las líneas de esta y teniendo su serie de emisarios que serán enumerados más adelante en este mismo número de «Nuestra Umbanda».

Todos los cultos siguieron conservando entre otros factores comunes el tema de las ofrendas a los diferentes reinos de la naturaleza, lugares que son donde se encuentran las energías de la naturaleza a las que se les da culto en todos los rituales que tienen orígen africano, y que por consiguiente son centro de las peregrinaciones, tanto hoy como ayer, de las personas que quieren solicitar alguna ayuda de sus Orixás y de las entidades protectoras.

http://www.chasque.apc.org/armando/nuestraumbanda/ediciones/c17/principal17c.htm

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

PUNTOS DE CARLOS DE ODE

Apelamos a la colaboracion de todos para subir toda la info que deseen con respecto a nuestra religion, para participar por favor, envianos un mail a religionesafro@hotmail.com

Nuestros Origenes Nuestros Origenes 2da Parte Nuestros Origenes 3da Parte

Datos personales