Ser, un médium de Umbanda, es ser un vínculo entre los espíritus de Caboclos, Pretos Velhos, Crianzas y de otras Entidades, con el fin de dar caridad y asistencia espiritual a nuestros semejantes, y por consecuencia ayudar a nuestros Guías Espirituales como a nosotros mismos para una más rápida elevación espiritual. Es por eso que se debe cuidar este don, debemos estudiar muy bien cada manifestación mediúmnica. Cualquier Terreiro, sea grande o pequeño, debe tener una orientación segura, saber que se está trabajando y trasmitiendo un camino cierto para no permitir ni el mal uso, ni el abuso de toda manifestación mediúmnica. Debemos recordar, que los enemigos existen tanto en el plano físico como en el plano astral, muchos quiumbas o espíritus obsesores, andan por el espacio, dispuestos siempre a perturbar o dañar a tantos desprevenidos. La sensibilidad del médium, hace que este perciba la aproximación de un espíritu y su irradiación, como una fuerza superior, es por eso, que un médium de Umbanda debe tener un alto grado de moral y una buena preparación física-mental, para evitar los encostamientos de estos espíritus perturbadores. Es por eso que cuando alguien siente eso de alguna manera, que comienza a desarrollar, alguna manifestación mediúmnica debe recurrir a algún Terreiro o Sacerdote serio, responsable y con una muy buena doctrina religiosa, para que lo guíe y lo aconseje de la mejor manera, para caminar ese don especial que nos ha dado Dios. Umbanda es una religión pujante y de progreso con un alto estudio científico-religioso, que con el pasar del tiempo, ya no es tan menospreciada ni tan incomprendida. Umbanda es una religión donde no existe clase social, pues llega a todos sin distinción de razas, credos o posición social, en un contacto directo, en donde tanto los médiums como las Entidades Espirituales en la que en ella trabajan, escuchan, aconsejan y ayudan al desorientado, al perturbado, al enfermo, tanto sea de cuerpo como de espíritu.